El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, llegó el lunes 22 de julio a Washington con el objetivo de reunirse con altos funcionarios del Gobierno estadounidense y con el presidente Joe Biden.
La visita, que se enmarca en un esfuerzo por avanzar en una tregua con Hamás, tiene lugar en un momento crítico interno en Estados Unidos. La presencia de Netanyahu en Washington coincide con un periodo de turbulencias en la política estadounidense. El reciente intento de asesinato del expresidente y candidato republicano Donald Trump y la decisión de Biden, que después de enfrentar cuestionamientos por su avanzada edad, abandonó la carrera presidencial, lo que coloca a Kamala Harris como la candidata demócrata, añade una capa de complejidad a las conversaciones entre los líderes.
Netanyahu inició su visita a Estados Unidos con un encuentro con representantes de las familias de los secuestrados estadounidenses por Hamás y con familiares que viajaron con él desde Israel. Durante la reunión, reafirmó su compromiso de rescatar a todos los rehenes. «Estamos decididos a devolver a todos. Las condiciones para traerlos de regreso están dadas, por la sencilla razón de que estamos ejerciendo una presión muy fuerte sobre Hamás», señaló el primer ministro en un comunicado del Gobierno israelí.
El presidente Joe Biden se reunirá con Netanyahu mañana jueves en el Despacho Oval de la Casa Blanca. Esta reunión se centrará en las negociaciones para un acuerdo de cese el fuego entre Israel y Hamás. Este acuerdo es mediado por Estados Unidos, Catar y Egipto, y busca la liberación de los 116 rehenes israelíes que permanecen en Gaza, de los cuales se cree que al menos 42 han muerto. Además, se discutirán las formas de permitir la entrada de más ayuda humanitaria al devastado enclave palestino.
Las relaciones entre Estados Unidos e Israel, a pesar de ser sólidas en términos de cooperación y apoyo militar, no están en su mejor momento debido al manejo de la guerra contra Hamás en la Franja de Gaza. Biden ha manifestado su descontento con la dureza de la ofensiva militar israelí, que ha resultado en más de 39.000 muertos, 90.000 heridos y 1,9 millones de desplazados desde el inicio del conflicto el 7 de octubre.
En tanto, un equipo de negociadores israelíes se prepara para reanudar mañana las conversaciones en busca de liberar a los rehenes a cambio de prisioneros palestinos retenidos en cárceles israelíes. Durante una tregua de una semana en noviembre, 105 rehenes fueron liberados a cambio de 240 prisioneros palestinos, marcando un avance significativo en las tensiones entre ambas partes.
Israel ha informado a Egipto que una delegación israelí llegará a El Cairo el miércoles por la noche, llevando consigo respuestas positivas que podrían facilitar un acuerdo. Según dos fuentes de seguridad egipcias, esta delegación es vista como un paso crucial para avanzar en las negociaciones.