Donald Trump jurará hoy como el 47.º presidente de los Estados Unidos, marcando el inicio de un mandato histórico.
Es el primer presidente desde Grover Cleveland, en 1893, en regresar al poder tras un intervalo fuera del cargo, reafirmando su influencia en la política estadounidense.
La ceremonia tendrá lugar en la Rotonda del Capitolio en Washington, D.C., un lugar emblemático para la democracia del país, mientras la capital enfrenta temperaturas invernales extremas.
Este evento también marca la toma de posesión de JD Vance como el 50.º vicepresidente, consolidando un capítulo único en la historia del gobierno estadounidense.
Con una agenda ambiciosa, el nuevo gobierno de Trump se prepara para implementar medidas inmediatas en áreas clave como inmigración, comercio y medio ambiente.
Estas políticas reflejan su estilo directo y su visión política, que buscan reforzar su legado en un país profundamente polarizado.
En un entorno de estrictas medidas de seguridad, miles de asistentes presenciarán el evento, mientras millones más lo seguirán a través de transmisiones en vivo desde distintos puntos del mundo.
La ceremonia se lleva a cabo en un contexto climático adverso, con tormentas invernales afectando gran parte de la nación.
Este desafío no ha opacado el entusiasmo de los seguidores de Trump, quienes celebran su regreso a la Casa Blanca.
La toma de posesión no solo marca el inicio de su segundo mandato, sino también un momento crucial para redefinir el rumbo político de los Estados Unidos en los próximos cuatro años.