Unos 600 agentes kenianos llegarán a Haití en el próximo noviembre, tal y como informó William Ruto, presidente de Kenia, para hacer frente a la aguda crisis de violencia que azota al país. Los uniformados se unirán a los casi 400 elementos provenientes de la nación africana que ya están en suelo haitiano.
La medida hace parte de un esfuerzo conjunto de al menos 10 gobiernos que han prometido enviar cerca de 2.900 tropas para participar de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMAS), liderada por Kenia, para hacer frente a la profunda violencia que experimenta Haití, en gran parte debido a las acciones de las pandillas.
El anuncio de Ruto ocurre en el marco de la visita del primer ministro haitiano, Garry Conille, a Nairobi, la capital keniana, tras pasar por los Emiratos Árabes Unidos recabando ayuda para su país.
El mandatario keniano aseguró que la misión estaba mejorando la seguridad en Haití, mientras que definió a la lucha de las fuerzas de seguridad contra las pandillas como “una batalla que podemos ganar”.
De acuerdo con la explicación de Ruto, los 600 oficiales que viajarán al país caribeño están actualmente en entrenamiento y estarán listos para su misión el próximo mes. Pese a ello, de las casi 3.000 tropas que se prevé que llegarán a Haití gracias a la MMAS, actualmente solo hay unos 430 agentes en territorio haitiano, la mayoría provenientes de Kenia.
Pero a medida que avanzan los esfuerzos de cooperación internacional, también persiste la violencia a manos de las bandas armadas en el país. La semana pasada, la banda Gran Grief perpetró uno de los ataques más letales en Haití en los últimos años, en el que al menos 115 personas perdieron la vida en una región agrícola, como apunta el más reciente recuento de las autoridades locales.
Al respecto, Conille afirmó que «la Policía y el contingente (keniano) pudieron desplegarse por carretera en cuestión de prácticamente horas para garantizar que la ciudad en cuestión estuviera rápidamente protegida».
Según información de Naciones Unidas (ONU), más de 700,000 personas han huido de sus hogares en Haití y se estima que más de 5 millones de haitianos pasan hambre, la mitad de la población del país.
El pasado septiembre, el mandato de la MMAS fue extendido por un año más gracias a la autorización unánime de ampliación por parte del Consejo de Seguridad de la ONU. En paralelo, China y Rusia se opusieron a que esta misión fuera convertida como en una de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas, propuesta hecha por Estados Unidos.
Informe: AFP