El empresario Alix Didier Fils-Aimé asumió como nuevo primer ministro de Haití en medio de una crisis severa causada por la violencia de bandas armadas.
Durante su discurso de toma de posesión, afirmó que no hay tiempo que perder y prometió priorizar la seguridad, atender la emergencia humanitaria y preparar elecciones inclusivas y transparentes. Su Gobierno contará con un equipo renovado de ministros, con ocho que continúan en sus funciones y diez nuevos integrantes.
El primer ministro enfatizó la necesidad de devolver la esperanza al pueblo haitiano enfrentando retos como la inseguridad física, económica y alimentaria.
Destacó que las vías principales deben volver a ser seguras y que los desplazados deben poder regresar a sus hogares. Reconoció los recursos limitados del país y subrayó la importancia de gastar los fondos públicos de manera austera y transparente.
El contexto en el que Fils-Aimé asume el cargo es especialmente difícil, marcado por el recrudecimiento de la violencia en Puerto Príncipe y un llamado de las bandas armadas a intensificar los ataques.
El líder del Consejo Presidencial de Transición, Leslie Voltaire, urgió a los nuevos ministros a asumir sus responsabilidades con premura para salvar la transición y abordar los desafíos democráticos y políticos que enfrenta la nación.