Israel ha intensificado sus ataques en la Franja de Gaza, dejando al menos 42 muertos en las últimas horas, según fuentes médicas. Los bombardeos alcanzaron zonas residenciales en el norte y el sur del enclave, mientras los tanques avanzan en territorio palestino.
Naciones Unidas advierte sobre una crisis humanitaria extrema, señalando que más de dos millones de personas están atrapadas sin acceso a agua potable ni alimentos suficientes, en lo que describen como una situación de “hambruna inminente”.
Desde el inicio del conflicto en octubre de 2023, más de 44.000 palestinos han muerto y más de 100.000 han resultado heridos, mientras que los ataques iniciales de Hamás causaron más de 1.100 muertes en Israel.
En paralelo, el Líbano acusa a Israel de violar el alto el fuego alcanzado tras días de enfrentamientos con Hezbolá. Las tensiones continúan escalando, con miles de muertos y heridos en ambos países desde el inicio de la guerra en Gaza.
La comunidad internacional enfrenta crecientes llamados para intervenir, mientras el conflicto sigue dejando un devastador saldo humano y amenaza con desestabilizar aún más la región.