Las personas con iPhones viejos no son las únicas que tendrán que esperar a Apple Intelligence. La compañía dijo la semana pasada que retendría el software en la UE, junto con iPhone Mirroring y SharePlay Screen Sharing, porque teme entrar en conflicto con las nuevas regulaciones. Lo que está en juego es la Ley de Mercados Digitales, una ley destinada a frenar a las grandes tecnologías que entró en vigor este año. «Nos preocupa que los requisitos de interoperabilidad de la DMA puedan obligarnos a comprometer la integridad de nuestros productos de manera que pongan en riesgo la privacidad del usuario y la seguridad de los datos», dijo Apple.
La UE respondió que no había nada malo en que Apple ofreciera sus servicios en Europa, “siempre que cumplan con nuestras normas destinadas a garantizar una competencia leal”.
La pregunta ahora es cómo responden los consumidores. ¿Los clientes europeos presionarán a los legisladores si les molesta no tener las nuevas funciones? Dado que Apple ya ha realizado otros cambios para adaptarse a la nueva ley, sobre todo en su App Store, este año podría ser difícil para su relación con los reguladores europeos.