El Departamento de Justicia de EE.UU. ha acusado a Southwest Key, la mayor cadena de albergues para niños migrantes, de no proteger a menores de abusos sexuales en sus instalaciones.
Desde al menos 2015, empleados de la organización, con sede en Texas, han sido acusados de violación, tocamientos, solicitudes de sexo, fotos de desnudos, voyerismo, y comentarios y gestos sexuales hacia niños.
La demanda incluye más de 100 denuncias y solicita sanciones civiles e indemnizaciones para las víctimas.
Southwest Key, que opera 29 centros en Arizona, California y Texas, afirma que las acusaciones no reflejan adecuadamente su compromiso con la seguridad y el bienestar de los niños.