El Centro Nacional de Huracanes (NHC) registró este domingo 17 de agosto una nueva perturbación en el Atlántico siguiente a la estela del huracán Erin, mientras monitorea la evolución de varios sistemas durante el punto álgido de la temporada de huracanes.
El organismo alertó que el nuevo sistema posee una probabilidad estimada de 20 % de desarrollo tropical durante los próximos siete días, en una región donde predominan condiciones que favorecen la formación de ciclones.
De acuerdo con el último boletín emitido la mañana del domingo por el NHC, el huracán Erin se mantiene desplazándose con dirección oeste-noroeste, generando fuertes lluvias y vientos intensos en zonas cercanas a las Islas Vírgenes y Puerto Rico. Antes de su rebaja de categoría, este sistema llegó a alcanzar la fuerza de un huracán categoría 5 el sábado, lo que representó un repunte extraordinario en su desarrollo.
Actualmente, mantiene vientos máximos sostenidos cercanos a los 200 kilómetros por hora y una presión mínima central cercana a los 940 milibares, cifras que lo mantienen como una amenaza para la navegación en el Atlántico y provocaron alertas marítimas para la costa este de Estados Unidos.
En total tres sistemas bajo vigilancia en la región, según un mapa difundido por el NHC. Además de Erin, la agencia meteorológica rastrea los movimientos de la Perturbación 1, un área de baja presión ubicada frente a la costa de Carolina del Norte, con una probabilidad de evolución del 10% durante la próxima semana, y la Perturbación 2, una onda tropical situada en el Atlántico central cerca de Cabo Verde.
Esta última mantiene desplazamiento hacia el oeste y el oeste-noroeste a una velocidad de entre 24 y 32 kilómetros por hora, siguiendo una trayectoria similar a la que tomó Erin días antes.
Autoridades meteorológicas estadounidenses advirtieron que, a pesar del bajo porcentaje de desarrollo previsto para la Perturbación 2 en las próximas 48 horas, sus condiciones podrían cambiar conforme el fenómeno avance hacia regiones con aguas más cálidas y menor cizalladura, lo que aumentaría el riesgo de evolución tropical más adelante.
En el comunicado oficial, el Centro Nacional de Huracanes señaló que “una onda tropical localizada cerca de las islas de Cabo Verde produce lluvias y tormentas desorganizadas; se prevé un desarrollo gradual del sistema a mediados o finales de la semana, conforme se desplaza por el Atlántico oriental y central“.
En este sentido, la probabilidad de formación ciclónica durante la semana se mantiene en un 20%, pronóstico que será actualizado conforme avance la situación.
El comportamiento de Erin y las nuevas perturbaciones ocurre al iniciar la etapa de mayor actividad de la temporada de huracanes del Atlántico, período comprendido entre agosto y octubre, durante el cual aumenta la posibilidad de formación de tormentas intensas capaces de afectar amplias zonas del Caribe, el sureste de Estados Unidos y países cercanos.
Los especialistas de la agencia meteorológica estadounidense recalcaron que la evolución de un único ciclón puede tener efectos considerables.
La delegación del Servicio Nacional de Meteorología en Miami (NWS Miami) escribió en sus redes sociales: “independientemente de los pronósticos para la temporada o el recuento final de tormentas, basta con que una sola tormenta impacte en tu comunidad para convertir el año en un evento significativo. La temporada de huracanes es un maratón, no una carrera rápida“.
El pronóstico de trayectoria para Erin sugiere que el sistema podría girar hacia el norte y alejarse hacia el mar durante los próximos días, aunque la vigilancia se mantiene activa ante eventuales fluctuaciones.
La atención de los meteorólogos sigue sobre la Perturbación 2, todavía en fase temprana, pues podría verse favorecida por las condiciones oceánicas conforme continúe su recorrido hacia el oeste. Newsweek agregó que pese a las probabilidades bajas para su desarrollo en el corto plazo, expertos del NHC seguirán publicando avisos y monitoreando la evolución de estos sistemas a través del Atlántico.
Diversos especialistas insistieron en que la vigilancia constante resulta fundamental. “No importa lo que digan los pronósticos previos, lo decisivo es estar preparados cada año“, citó el medio estadounidense.
Estos llamados se producen en medio de un contexto donde el comportamiento de los sistemas tropicales puede cambiar en cuestión de horas, según remarcaron los expertos consultados por Newsweek.
Fuente: Infobae