El conflicto armado entre Irán e Israel, que se intensificó en junio de 2025, está generando una serie de riesgos logísticos que afectan las cadenas de suministro globales. Las tensiones han provocado interrupciones en rutas marítimas clave además de aumentos en los costos de energía y una creciente incertidumbre en los mercados internacionales.
Interrupciones en rutas marítimas estratégicas
El estrecho de Ormuz, por donde transita aproximadamente el 20% del petróleo mundial, ha sido escenario de incidentes recientes como la colisión de dos petroleros cerca de Fujairah, en los Emiratos Árabes Unidos. Este tipo de eventos pone en evidencia la vulnerabilidad de las rutas marítimas en la región, esenciales para el comercio global.
Además, el conflicto ha reavivado los temores sobre un posible cierre del estrecho por parte de Irán, lo que podría disparar los precios del petróleo y generar una crisis energética mundial.
Aumento de costos y volatilidad en los mercados energéticos
Los precios del petróleo han experimentado incrementos significativos debido a la incertidumbre en la región. Por ejemplo, el crudo Brent alcanzó los $76.45 por barril, el nivel más alto desde principios de 2025. Este aumento impacta directamente en los costos de transporte y producción a nivel global.
Desviaciones y retrasos en las cadenas de suministro
Las empresas están reevaluando sus rutas logísticas, optando por alternativas más seguras pero costosas. Por ejemplo, algunos cargamentos que tradicionalmente transitarían por el Mar Rojo son redirigidos alrededor del Cabo de Buena Esperanza, lo que implica mayores tiempos de tránsito y costos adicionales.
Recomendaciones para mitigar los riesgos
Ante este panorama, se recomienda que las empresas:
- Diversifiquen sus rutas logísticas: Evitar la dependencia de una única ruta puede reducir la exposición a riesgos.
- Revisen sus contratos de transporte: Incluir cláusulas que contemplen situaciones de fuerza mayor y ajustes en los costos.
- Fortalezcan sus relaciones con proveedores alternativos: Esto puede garantizar el suministro en caso de interrupciones en las cadenas existentes.
- Monitoreen de cerca la situación geopolítica: Estar informados permite tomar decisiones proactivas y adaptarse rápidamente a los cambios.
El conflicto entre Irán e Israel está generando una serie de riesgos logísticos que afectan las cadenas de suministro globales. Es esencial que las empresas implementen estrategias de mitigación para adaptarse a este entorno volátil y garantizar la continuidad de sus operaciones.
Fuente: Todo Logística