Un convoy de vehículos de la embajada de Estados Unidos en Haití fue atacado por pandilleros en la comuna de Tabarre, donde está ubicada la misión diplomática estadounidense.
A pesar de la gravedad del incidente, no se reportaron víctimas fatales ni heridos entre el personal del convoy, según informó la embajada. Este ataque se suma a la creciente inseguridad en Haití, donde las pandillas controlan amplias zonas de la capital y generan temor entre la población.
Ante esta situación, la embajada emitió una alerta de seguridad a su personal, instándoles a evitar ciertas rutas en Tabarre para minimizar riesgos. Washington ha reiterado en múltiples ocasiones que las condiciones de seguridad en Haití son limitadas y ha desaconsejado a sus ciudadanos viajar al país.
Desde marzo, Haití se encuentra en Estado de Emergencia, y el nivel de alerta máxima para los estadounidenses continúa vigente debido al aumento de secuestros y violencia en general.
La violencia pandillera en Haití también ha intensificado el debate sobre la responsabilidad de Estados Unidos en la crisis actual. Medios locales destacan que gran parte de las armas y municiones utilizadas por las pandillas provienen de territorio estadounidense.
Además, recuerdan que la intervención de Estados Unidos en Haití durante el siglo XX dejó secuelas profundas en la estabilidad política y económica del país.