Un impactante testimonio de Justin Christie, residente de Altadena, Los Ángeles, revela el horror vivido durante el devastador incendio forestal “Eaton”. Christie, cuya familia ha vivido en la zona desde 1967, narró cómo las llamas alcanzaron una de sus palmeras, lo que lo llevó a evacuar rápidamente a su familia.
Más tarde, regresó para combatir el fuego por su cuenta, temiendo en múltiples ocasiones perder su hogar. Afortunadamente, su vivienda permaneció intacta, pero la experiencia lo dejó marcado por la magnitud de la destrucción en la comunidad.
Christie describió escenas apocalípticas, con explosiones de gas, coches en llamas y cristales rotos por doquier. Según relató, el ruido era ensordecedor, comparándolo con el estruendo de varios trenes de mercancías.
El incendio, que comenzó en Pacific Palisades el martes pasado, fue avivado por los vientos de Santa Ana, lo que aceleró su propagación. Hasta ahora, se reportan 16 fallecidos, más de 180,000 evacuados y más de 12,000 estructuras dañadas o destruidas.
Este incendio se posiciona como una de las tormentas de fuego más destructivas que ha azotado California. Para Christie y otros sobrevivientes, las pérdidas son incalculables, tanto materiales como emocionales.
A pesar de su fortuna al salvar su casa, Christie lamentó profundamente la tragedia que ha dejado a tantas familias sin hogar.