El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, rechazó las declaraciones de los expresidentes colombianos Álvaro Uribe e Iván Duque, quienes pidieron una intervención militar internacional para deponer al gobierno de Nicolás Maduro.
Padrino López aseguró que el pueblo venezolano está preparado para defender su territorio hasta las últimas consecuencias, y calificó a los exmandatarios como «agentes del imperialismo» que promueven acciones irresponsables contra Venezuela.
Uribe y Duque argumentaron, en un acto público en Cúcuta, que la intervención militar es necesaria para restaurar la democracia en Venezuela y convocar a elecciones libres.
Estas declaraciones han sido condenadas no solo por el gobierno venezolano, sino también por el actual presidente colombiano, Gustavo Petro, quien acusó a sus predecesores de fomentar la violencia entre países vecinos y pueblos hermanos.
El llamado a la intervención militar ha intensificado las tensiones diplomáticas entre Colombia y Venezuela, en un contexto donde ambos países buscan superar décadas de conflicto y confrontaciones políticas. Petro advirtió que estas propuestas solo buscan avivar el enfrentamiento entre los dos pueblos.