El presidente Andrés Manuel López Obrador está a punto de concluir su mandato, marcando casi seis años de una administración que ha transformado la política, economía y sociedad de México. Conocido como la ‘Cuarta Transformación’, su gobierno ha logrado consolidar el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) como la fuerza política predominante, alcanzando la mayoría absoluta en el Congreso y gobernando 24 de los 32 estados del país.
A pesar de las predicciones pesimistas de la oposición sobre una crisis económica, el desempeño macroeconómico ha sido notable, con un crecimiento promedio anual del 1.0% y la inflación controlada en un 5.1%. Uno de los logros más destacados de la administración de López Obrador ha sido la estabilidad del peso mexicano, que no solo se ha mantenido firme frente al dólar, sino que ha fortalecido su posición en los últimos años.
México ha ascendido en la clasificación mundial de economías, pasando del puesto 15 al 12, convirtiéndose en el principal socio comercial de EE.UU., por delante de Canadá y China. Este crecimiento económico se ha visto respaldado por un aumento en la inversión extranjera, que alcanzó un récord de 36,000 millones de dólares en 2023, junto con un crecimiento del 61.4% en la recaudación de impuestos.
A pesar de los avances económicos, el legado de López Obrador también incluye una deuda pendiente en términos de reducción de la pobreza. Si bien su administración ha creado 2.3 millones de empleos formales, la pobreza sigue siendo un desafío significativo para el país.
La mezcla de logros y retos presenta un cuadro complejo de su gobierno, que termina con una popularidad inusual para un líder mexicano, alcanzando el 70% en las encuestas. Este contraste entre los logros económicos y los problemas sociales plantea preguntas sobre la dirección futura de México bajo el liderazgo de Claudia Sheinbaum.