Un incendio, probablemente provocado por la explosión de baterías de litio, arrasó una fábrica cerca de la capital de Corea del Sur: murieron 22 trabajadores inmigrantes, en su mayoría chinos, y ocho personas quedaron con serias lesiones.
El incendio comenzó después de que las baterías explotaran mientras los trabajadores las examinaban y empaquetaban en el segundo piso de la fábrica en la ciudad de Hwaseong, justo al sur de Seúl.
Entre los muertos había 18 chinos, dos surcoreanos y un laosiano, dijo el funcionario de bomberos local Kim Jin-young en una sesión informativa televisada. Aún restaba identificar la nacionalidad de uno de los muertos.
En las últimas décadas, muchos chinos, incluidas personas de etnia coreana, han emigrado a Corea del Sur en busca de empleo. Al igual que otros inmigrantes extranjeros de países del Sudeste Asiático, a menudo terminan en fábricas o en trabajos físicamente exigentes y mal remunerados que los surcoreanos de mejor posición económica rechazan.
Fuente: AP