Francisco Lindor, el shortstop de los Mets de Nueva York, será sometido a una resonancia magnética para evaluar el dolor persistente en la parte baja de su espalda, que lo ha forzado a abandonar el terreno de juego en dos ocasiones durante los últimos tres días.
El domingo, Lindor dejó el partido contra los Filis de Filadelfia tras resentir la molestia luego de su primer hit. Este problema ya lo había obligado a salir del juego del viernes y a descansar el sábado, lo que ha generado preocupación en el equipo sobre su disponibilidad para los próximos encuentros.
El propio Lindor comentó que el dolor en su espalda se ha intensificado en la serie contra Filadelfia, aunque lo ha sentido durante algún tiempo. «Sentí la molestia desde los primeros pasos que di fuera de la caja de bateo», explicó Lindor.
El equipo médico de los Mets evaluará al jugador este lunes para determinar el alcance de la lesión y decidir si necesitará tiempo fuera del diamante, algo que podría ser un golpe importante para el equipo en este punto crucial de la temporada.
A pesar de este contratiempo, Lindor ha tenido una destacada campaña, con un promedio de bateo de .271, 31 jonrones y 86 carreras impulsadas.
Su rendimiento ha mejorado notablemente desde un inicio complicado, donde bateaba para .193 en mayo, para luego recuperarse y mostrar un sólido desempeño desde entonces.
Los Mets esperan que la resonancia determine una lesión manejable y que Lindor pueda regresar pronto a la alineación.