La presión que genera un apretado calendario, armado por copas nacionales, copas internacionales y campeonatos locales, y los compromisos con las selecciones (estamos ingresando a la última semana FIFA del año), causa problemas físicos en los jugadores de LaLiga de España con bajas realmente muy sensibles.
Barcelona lo sufrió por partida doble, ya que también perdió merecidamente ante la Real Sociedad en el País Vasco. Pero a los tres puntos que le acortaron sus perseguidores debe sumarse la lesión de Lamine Yamal, de grado 1 de la sindesmosis del tobillo derecho: el tiempo de baja aproximado será entre dos y tres semanas; también su goleador, Robert Lewandowski, presenta una lesión lumbar con un tiempo de recuperación aproximado de 10 días.
El Real Madrid ganó pero perdió: ¿cómo? Triunfó por los puntos, pero Rodrygo tuvo una lesión muscular del bíceps femoral, Eder Militao se rompió el ligamento cruzado y los meniscos de su pierna derecha y Lucas Vásquez sufrió una molestia en el aductor que lo marginará hasta diciembre.
Aparte de estas tres bajas, el equipo blanco de Madrid no cuenta con Aurélien Tchouaméni, que sufrió un importante esguince de rodilla, y tampoco tiene disponible a Thibaut Courtois, por una lesión muscular. Esto sin contar que David Alaba sigue con su lenta recuperación de su rotura del ligamento cruzado anterior, y Dani Carvajal ya fue operado de esa misma lesión y volverá recién en septiembre del próximo año. Desde agosto de 2024, cuando arrancó la temporada, Real Madrid acumula 24 lesiones.
A la presión típica de las competiciones de alta escala, se le suma, no lo olvidemos, la obligación de jugar en un gran nivel, dado que los ojos del mundo están puestos sobre uno de los torneos más importantes del mundo y sus fanas locales, además, pretenden, con cierta lógica económica, que estos grandes equipo ganen todo lo que disputen. Ah, como si fuera poco, no participarán de las copas y eliminatorias para sus respectivos seleccionados.