Una juez federal en Nueva York dictaminó que la mujer que presentó una demanda por violación contra los cantantes Jay-Z y Sean “Diddy” Combs puede mantener su anonimato bajo el pseudónimo de “Jane Doe”. La juez Analisa Torres consideró que el caso es “altamente sensible” y que revelar la identidad de la demandante podría agravar su condición de depresión y trastorno de estrés postraumático, derivada de las agresiones sexuales que presuntamente sufrió a los 13 años.
No obstante, la juez dejó abierta la posibilidad de que en una etapa posterior del caso se exija la revelación de su identidad para facilitar el desarrollo de la investigación y la recolección de pruebas.
La demanda describe eventos ocurridos en una fiesta, donde la mujer asegura que fue drogada por Jay-Z y Combs. Según el relato, fue llevada a una habitación donde ambos hombres, junto con una mujer no identificada, la agredieron sexualmente.
Este caso se suma a otras denuncias previas contra Sean Combs, quien enfrenta acusaciones similares, incluyendo testimonios de exempleados que alegan haber sido obligados a encubrir actos ilícitos relacionados con drogas, agresiones sexuales y otras actividades durante sus eventos privados.
Aunque Diddy ha negado las acusaciones y se ha declarado inocente en otros procesos legales, las denuncias han generado atención mediática y renovadas críticas hacia la industria musical.
Por su parte, la juez Torres enfatizó que preservar el anonimato de la demandante es una medida necesaria para protegerla de posibles represalias y garantizar que su testimonio pueda ser escuchado en condiciones seguras.