Un incendio forestal en Pacific Palisades, Los Ángeles, ha forzado la evacuación de 30,000 personas y amenaza más de 10,000 viviendas. Las llamas, impulsadas por vientos de hasta 160 km/h, ya han consumido más de 500 hectáreas.
Más de 250 bomberos combaten el incendio mientras las autoridades advierten sobre una tormenta de viento que podría agravar la situación.
La evacuación se ha complicado por calles bloqueadas y vehículos abandonados. El gobernador de California, Gavin Newsom, visitó la zona, informando sobre múltiples estructuras destruidas y asegurando apoyo federal. Mientras tanto, científicos señalan que estos eventos extremos están relacionados con el cambio climático.
La alcaldesa Karen Bass pidió a los residentes seguir las órdenes de evacuación, y eventos locales, como un anuncio presidencial y el estreno de una película, fueron cancelados debido a los fuertes vientos. A pesar de la magnitud del incendio, no se han reportado heridos.