Un festival anual en Puthiyangadi, Kerala, terminó en caos cuando un elefante, parte de las celebraciones, embistió inesperadamente contra la multitud, dejando al menos 23 personas heridas. Entre los afectados, una persona permanece en estado crítico.
Los asistentes estaban observando a cinco paquidermos engalanados con adornos dorados, una tradición habitual en los festivales de la región, cuando uno de los elefantes comenzó a correr hacia la multitud, generando pánico y un conato de estampida.
Las imágenes captadas muestran el momento en que el elefante atrapó con su trompa a un asistente, lo zarandeó y lo lanzó contra otros espectadores antes de ser controlado por su cuidador.
El uso de elefantes en festivales religiosos es una práctica profundamente arraigada en la India y otros países del sur de Asia, donde estos animales son símbolos de poder y prosperidad en el hinduismo. Sin embargo, estos eventos no están exentos de riesgos, como lo demuestra este incidente.
La India, hogar de la mayor población de elefantes asiáticos del mundo, cuenta con alrededor de 30,000 ejemplares salvajes y múltiples reservas destinadas a su protección. A pesar de ello, los conflictos entre humanos y elefantes son frecuentes, con más de 1,600 muertes humanas reportadas entre 2020 y 2023.
Este trágico episodio reabre el debate sobre el uso de animales en festividades públicas. Si bien las tradiciones culturales son importantes, muchos cuestionan la seguridad y el bienestar de los animales y las personas involucradas.
Organizaciones animalistas y grupos de derechos humanos han pedido mayores regulaciones para garantizar que estas prácticas se realicen de manera segura, sin comprometer la vida de los asistentes ni la dignidad de los elefantes.