Aumentó a 300 la cifra de personas que murieron por un deslizamiento de tierra en la aldea de Kaokalam en la provincia de Enga, 600 kilómetros al noroeste de Port Moresby, la capital de Papúa Nueva Guinea.
Unas 1.100 casas quedaron enterradas y al menos 6 aldeas en la región de Mulitaka se vieron afectadas. Aunque las carreteras están cerradas al tráfico debido a los deslizamientos de tierra, el transporte a la región sólo es posible en helicóptero.
Las autoridades temen que la pérdida de vidas aumente.