El Senado de Argentina aprobó por unanimidad una resolución que anula el reciente aumento del 6.5% en las dietas legislativas, una medida que había generado una gran polémica en el país.
Con 65 votos a favor y ninguno en contra, los senadores decidieron desvincular sus salarios de las negociaciones paritarias del personal legislativo hasta el final del año.
La decisión se produce luego de que el presidente Javier Milei criticara duramente el incremento salarial, calificándolo de «traición al pueblo argentino» en un momento en que el país atraviesa un ajuste económico.
El aumento habría llevado los ingresos mensuales de los senadores a nueve millones de pesos argentinos, una cifra que desató la indignación pública.