La Sala 1 de la Corte Suprema de Justicia alcanzó la mayoría necesaria para condenar a Jair Bolsonaro a 27 años y 3 meses de prisión por el intento de golpe de estado contra Lula.
De estos 27 años y 3 meses, 24 años y 9 meses corresponden a prisión dado que la pena para delitos que requieren régimen cerrado y 2 años y 9 meses a prisión preventiva porque la pena para delitos que requieren régimen abierto o semiabierto.
Como la condena total supera los 8 años, Bolsonaro deberá comenzar a cumplirla en régimen cerrado. La acusación de la Fiscalía General lo ubica como la figura central de la trama golpista con cinco delitos: intento de abolición violenta del Estado de derecho democrático; organización criminal armada; daños agravados a bienes federales; y daños al patrimonio protegido.
El voto decisivo lo dio la jueza Carmen Lucia que dijo a la hora de justiciar su voto que «no hay vacuna necesaria para el autoritarismo» y remarcó que «el golpe de estado es un crimen». «El 8 Enero de 2023 no fue un acontecimiento banal después de una comida de domingo después de que la gente saliera a pasear», sostuvo la magistrada. Luego se produjo voto de Cristiano Zanin que terminó de definir la condena.
La larga exposición de la jueza estuvo marcada por el voto de su colega, Luiz Fux, a favor de la absolución de Bolsonaro durante la jornada del miércoles. Fux se convirtió en un nuevo héroe para el bolsonarismo pero generó alta tensión entre los magistrados.
Tanto Lucia como Zanin detallaron con precisión los argumentos que confirman el rol de Bolsonaro como articulador de la organización criminal que avanzó en dos sentidos: el plan «Puñal verde y amarillo» que buscaba asesinar a Lula, su vice Geraldo Alckmin y Alexander de Moraes para decretar un estado de emergencia que genera un gobierno de transición para volver a llamar a elección y por los hechos del 8 de enero en la que miles de bolsonaristas atacaron y tomaron el Palacio de Gobierno, la Corte Suprema y el Congreso para perpetrar un golpe de estado.
Como la condena total supera los 8 años, Bolsonaro deberá comenzar a cumplirla en régimen cerrado. La acusación de la Fiscalía General lo ubica como la figura central de la trama golpista con cinco delitos: intento de abolición violenta del Estado de derecho democrático; organización criminal armada; daños agravados a bienes federales; y daños al patrimonio protegido.
La acción penal involucra a 34 personas en total, incluyendo comandantes de las fuerzas de seguridad que colaboraron en la ejecución de los atentados. De acuerdo con la ley brasileña, el expresidente y sus principales colaboradores se enfrentan a penas que pueden llegar a los 43 años de prisión.
Los otros condenados son Alexandre Ramagem, el almirante y ex comandante de la Marina, Almir Garnier Santos, Anderson Torres, ex-ministro da Justicia, el general de reserva y ex jefe de Gabinete Institucional del ministerio de Seguridad, Augusto Heleno, el teniente coronel y ex ayudante personal de Bolsonaro, Mauro Cid, el general y ex ministro de Defensa, Paulo Sérgio Nogueira y Walter Braga Netto, general de reserva, exjefe de la Casa Civil y ex candidato a vicepresidente.
Ahora el bolsonarismo profundizará la estrategia de las sanciones y aranceles de parte del gobierno de Donald Trump y la presión a los líderes del Congreso para debatir una amnistía que le permita a Bolsonaro ser candidato a presidente en 2026, algo que parece prácticamente imposible.
Fuente: La Política Online