El presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Agustín Lozano, fue detenido en su domicilio en San Borja como parte de una investigación en curso por presuntos actos de corrupción.
La detención preliminar, con duración de 15 días, se llevó a cabo junto con un allanamiento en las oficinas de la FPF en la Videna, así como en otros seis inmuebles ubicados en Lima y provincias. Durante el operativo, las autoridades buscaron archivos y documentos relacionados con los supuestos actos ilícitos.
Además de Lozano, fueron arrestados otros directivos y personas asociadas, entre ellos el exsecretario de la FPF, Jean Marceal, y el presidente del club Sporting Cristal, Joel Raffo.
Las investigaciones señalan que este grupo estaría involucrado en una red de favores y beneficios económicos que habría afectado la transparencia de las competiciones en la Liga 1, Liga 2 y ligas departamentales, al permitir omisiones en sanciones a clubes específicos. Según las autoridades, estas prácticas han creado un ambiente de desigualdad en el fútbol peruano.
La Federación Peruana de Fútbol aún no ha emitido un comunicado oficial sobre el arresto de su presidente y el impacto potencial en la estructura deportiva del país. En una breve declaración a la prensa, Lozano pidió calma a su familia y mostró esperanza en que “se haga justicia”. El allanamiento de la Videna, con agentes que forzaron la entrada en busca de pruebas, marcó uno de los momentos más tensos de la jornada.