Evo Morales ha pedido a sus partidarios suspender los bloqueos que mantienen desde hace semanas en Bolivia y ha anunciado que comenzará una huelga de hambre para exigir al Gobierno de Luis Arce mesas de diálogo sobre temas económicos y judiciales.
Morales instó a hacer un «cuarto intermedio» en las protestas para evitar violencia y daños económicos. Los bloqueos, iniciados en protesta por investigaciones judiciales contra Morales y el alza de precios, han provocado enfrentamientos y detenciones.
El anuncio de Morales se dio tras acusaciones del Gobierno de que sus simpatizantes tomaron instalaciones militares en Cochabamba. Tanto Arce como el Ejército han calificado estos hechos como «traición a la patria».
La disputa entre Morales y Arce, ambos del Movimiento al Socialismo (MAS), refleja tensiones en torno a las elecciones de 2025, en las que Morales acusa a Arce de impedir su candidatura, acusación que Arce niega.