Los docentes y trabajadores no docentes de universidades en Argentina iniciaron este 21 de octubre una huelga nacional de 48 horas, en medio de un creciente conflicto con el gobierno por la falta de actualización salarial y el desfinanciamiento de las instituciones educativas.
El paro fue confirmado por la Asociación de Docentes de la Universidad de Buenos Aires (UBA), la más importante del país, a través de sus redes sociales bajo el lema “21 de octubre. Yo paro”. La medida es respaldada por los cinco sindicatos de docentes y no docentes que integran el Frente Sindical de Universidades.
“Sin salarios dignos no hay trabajadores, sin trabajadores no hay universidad, y sin universidad no hay futuro”, afirmaron los gremios en un comunicado, subrayando la gravedad de la situación. Esta huelga es la tercera que realiza el sector universitario en menos de dos semanas, tras los paros del 10 y 17 de octubre.
Además de la huelga, el plan de lucha incluye otras formas de protesta, como clases públicas, abrazos simbólicos a las facultades, y la convocatoria a una “marcha blanca” el 22 de octubre. Esta movilización unirá a trabajadores del sector educativo y sanitario en rechazo a los recortes ejecutados por el gobierno de Javier Milei.
La comunidad universitaria intensificó sus protestas luego de que la Cámara Baja del Congreso avalara el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario, que garantizaba los fondos para el año en curso.
Los sindicatos denunciaron un retraso salarial de aproximadamente el 50% desde diciembre de 2023 y criticaron que el veto eliminó la obligación del gobierno de actualizar los salarios a partir del 1 de diciembre de 2023, de acuerdo con la inflación.
La caída de esta ley afectó a unos 155.000 profesores y 60.000 trabajadores no docentes de las 60 universidades nacionales del país. En respuesta, más de 70 facultades y universidades provinciales han sido ocupadas por estudiantes y personal en protesta por la falta de fondos y el deterioro de las condiciones laborales.