Evo Morales, expresidente de Bolivia, ha sido citado a declarar por un caso de trata y tráfico de menores, en medio de tensiones políticas que afectan su candidatura para las elecciones de 2025.
El Fiscal General, Juan Lanchipa, informó que Morales deberá presentarse el próximo jueves, a pesar de que su abogado, Carlos Romero, ha afirmado que el caso ya fue cerrado en 2020, al no haber denunciantes ni víctimas.
El caso ha generado una intensa lucha dentro del Movimiento al Socialismo (MAS), partido de Morales, enfrentando al expresidente con el actual mandatario, Luis Arce. Morales acusa a Arce de utilizar estos procesos judiciales para debilitar su candidatura, mientras Arce lo señala por promover protestas sociales.
La situación también ha desatado críticas de la oposición, que acusa al gobierno de aprovechar el escándalo para desviar la atención de la crisis económica y los incendios forestales que afectan al país.
La investigación sobre Morales incluye denuncias previas de una supuesta relación con una menor en 2016, que habrían sido encubiertas por la injerencia política en la justicia.
Este caso podría marcar un punto crítico en la carrera política de Morales, quien ha sido una figura clave en la política boliviana desde los años noventa.