El cantante de country Garth Brooks ha negado públicamente las acusaciones de violación que han salido a la luz recientemente. La denuncia fue presentada por una exempleada, Jane Roe, quien trabajó para Brooks y su esposa, Trisha Yearwood, desde 1999 y afirma haber sido acosada y agredida sexualmente por el artista.
En su defensa, Brooks aseguró que la denuncia es parte de un intento de extorsión y difamación en su contra, y confía plenamente en que la verdad prevalecerá.
La querella, que incluye detalles sobre presuntas insinuaciones sexuales y acoso por parte de Brooks, sostiene que Roe quedó profundamente traumatizada por los supuestos eventos.
El artista, de 62 años, ha respondido a través de declaraciones a medios y redes sociales, afirmando que ha sido objeto de amenazas y mentiras con el fin de obtener una compensación millonaria. Mientras tanto, su equipo legal ha presentado una contrademanda por extorsión y difamación.
El caso se presenta en un contexto más amplio de denuncias de abuso sexual contra figuras públicas en Estados Unidos, sumándose a una lista que incluye nombres como el rapero Sean “Diddy” Combs.
Brooks, quien continúa con una residencia en Las Vegas hasta 2025, insiste en su inocencia y expresó que el apoyo de sus fans es fundamental durante este momento difícil.