El Papa argentino Francisco cuestionó al gobierno de su país por el uso de gas pimienta en una movilización realizada la semana pasada que reclamaba contra el veto del presidente Javier Milei a la ley de movilidad jubilatoria.
Su Santidad habló en el décimo aniversario del Primer Encuentro Mundial de Movimientos Populares con la presencia de representantes de movimientos sociales de la Argentina, entre ellos Juan Grabois y el titular de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Alejandro “Peluca” Gramajo, ambos de clara confrontación con el presidente Javier Milei.
El Pontífice afirmó: “Me hicieron ver un filmado de una represión de hace una semana, menos quizás. Obreros, gente que pedía por sus derechos en la calle y la Policía la rechazaba con una cosa que es lo más caro que hay, ese gas pimienta de primera calidad. No tenían derecho a reclamar lo suyo porque eran revoltosos, comunistas … y el gobierno se puso firme: en vez de pagar justicia social, pagó el gas pimienta. Les convenía. Ténganlo en cuenta”.
Incluso, mencionó un presunto hecho de corrupción que se habría producido recientemente bajo la gestión actual: “Mi abuela nos repetía siempre, estén atentos que el diablo entra por los bolsillos. Siempre. Que una coima aquí, una cosa allá…
«Me contaba un emprendedor internacional, que estaba haciendo en Argentina unas inversiones de extensión que estaban llevando adelante, que trabajan muy bien y fue un acuerdo. Fue a presentar al ministro un nuevo plan, el ministro lo atendió muy bien y dijo ‘dejemeló, ya lo van a llamar…’”, continuó. “Al día siguiente, el secretario del ministro lo llamó, le dijo si puede pasar, ‘así lo entregamos el permiso’. Le entregó los papeles y la firma…y cuando él se estaba por levantar, le dijo: ¿y para nosotros, cuánto? La coima (soborno). El diablo entra por el bolsillo, no se olviden”.